Lo que pensamos de tener hijos, morir y vivir en el siglo XXI

Natalistas y pro eutanasia. Pro decrecimiento de la población y defensores del suicidio asistido.

Vamos con lo más leído de la edición anterior: desafío de la sincronía, salir a cenar con desconocidos, el tren del hierro de Mauritania y la paradoja del turismo extremo.

Aceptar que la humanidad se va reducir o querer provocarlo

Hay un personaje secundario en Cuál es tu tormento de Sigrid Nunez (la novela en la que Almodóvar basó La habitación de al lado) al que intuitivamente detesté. Es el ex-marido de una de las protagonistas. Escritor dedicado a predicar el colapso del mundo debido al cambio climático, llega a abogar por el anti natalismo y rechaza conocer a su nieto. Es más, se enfada con su hijo por tener la estúpida y dañina idea de procrear.

Al principio consideré traer su historia a la Causas y Azares al hilo de cómo ideas que aparecen como extremas acaban siendo aceptadas y parte de lo socialmente aceptable. Quizás llego un poco tarde para situarla ahí.

El tema de la natalidad y la población mundial lo hemos tratado muchas veces. Con datos, tendencias y algunas reflexiones sobre sus causas lo tenemos en “La humanidad se va a reducir. Es hora de aceptarlo”. Hoy quería compartir los debates y las ideas que surgen de la nueva realidad económica, informativa, cultural y ecológica.

Comencemos por el filósofo sudafricano "antinatalista" David Benatar. Joshua Rothman en New Yorker (en inglés) y Pablo Mula en Letras Libres nos hacen una buena introducción. Benatar argumenta que la vida está tan llena de sufrimiento que, por compasión, los seres humanos deberían dejar de tener hijos. La procreación sería un acto intrínsecamente cruel e irresponsable porque la vida misma está "impregnada de maldad". Aquí se le puede escuchar directamente, citando un dato curioso: Rust Cohle de ‘True Detective’ está basado en sus ideas.

Menos felicidad y más eutanasias

Hace poco leía a JL Antúnez sobre un nuevo estudio que confirma que somos menos felices que en años y décadas anteriores. Especialmente la gente joven. Véase en profundidad en esta pieza de Christina Caron en NYT (en inglés).

De todas formas Benatar me resulta poco convincente. Es tan fácil confundir el amargor y los crepúsculos propios con los de todos los demás. La eutanasia parece, a priori, una idea más persuasiva.

Explica Alfredo Joignant en El País que hace poco se supo que la muerte de Daniel Kahneman había sido por suicidio asistido:

No había ninguna razón de salud para que esta decisión tan íntima y personal fuese tomada: es cierto que Kahneman se quejaba de sus riñones (como cualquier persona de 90 años) y alegaba una “frecuencia” al alza de “lapsos mentales”, para concluir que “es hora de partir”

No es, por tanto, exactamente eutanasia, en la que un médico administra la sustancia que causa la muerte ante un sufrimiento intolerable y/o irreversible. Como fenómeno, cotiza al alza: en Holanda se registraron 9 958 casos de eutanasia en 2024 (The Guardian) con un cada vez mayor número de casos justificados por “trastornos psicológicos”. En España estamos en números mucho más bajos según el ministerio de Sanidad: 697 en 2023 a partir de 1515 solicitudes recibidas.

Pablo Malo comparte y resume la pieza de Psychobabble (en inglés) sobre el dilema para la psiquiatría que suponen la eutanasia y el suicidio asistido

“No se trata sólo de un cambio filosófico, sino de un colapso existencial de la profesión psiquiátrica. Porque una vez que aceptamos que algunas vidas no merecen ser vividas, nos vemos obligados a preguntarnos: ¿cuál es ahora el papel de la psiquiatría? ¿Debemos redefinir los criterios de la enfermedad mental para permitir un proceso en el que le digamos tranquilamente a un paciente suicida: «Sí, quizás tengas razón»?”

Hay críticas de fondo, pero también por la vía práctica. Maria Cheng en La Times o David Moscrop traducido en Rebelión sobre un informe que ha identificado varios casos en Canadá en los que los pacientes pidieron se les aplicara la muerte asistida en parte por razones sociales, tales como aislamiento y temor a quedar sin casa.

Pro elección o pro muerte

Guy Bartkus era un joven de 25 años que detonó un coche bomba frente al American Reproductive Centers el 17 de mayo, matándose él e hiriendo a otras cuatro personas. Katherien Die en Default.blog indaga en las motivaciones nihilistas del individuo que reflejó en su participación en el foro Sanctioned Suicide.

Esta web nace tras el cierre del subredit original, baneo justificado en que se planteaba como un sitio de discusión “pro elección” pero había devenido en un entorno “pro suicidio”. El sitio web pone en contacto a usuarios con vendedores, personas que venden "kits de suicidio" a los desesperados. El contenido de estos kits va desde veneno hasta dispositivos de "bolsa de salida" destinados a ser rellenados con gas. En el caso de Bartkus, sus ideas iban un paso más allá: no solo eran “pro suicidio”, sino abiertamente “pro muerte” y contrarias a la natalidad.

Choca leer esta historia. Durante décadas, Eve Baer estuvo convencida de que su hijo, aunque no respondía tras una grave lesión cerebral, seguía consciente. La ciencia acabó por darle la razón. Sarah Zhang en The Atlantic (en inglés).

En el otro extremo del espectro recupero varios Causas y Azares en los que aparecían una y otra vez individuos obsesionados con la longevidad, con rejuvencer, con la innovación técnica y científica para lograrlo.

Y el natalismo / anti natalismo resultante

Hay un natalismo creciente a la luz de los datos de decrecimiento de población de la mayoría de países.

Por aquí discutimos el asunto con estudios que apuntaban a lo siguiente:

a medida que los países se enriquecen y aumenta el rendimiento de la educación, se espera que las familias inviertan más en un menor número de hijos. Y a medida que se amplíen las opciones de trabajo de las mujeres, aumentará el coste de oportunidad de su tiempo, haciendo más difícil la disyuntiva entre familia y carrera profesional. De acuerdo con esta teoría, muchos lugares ya han pasado por una "transición demográfica", de ser países pobres y de alta fecundidad a cada vez más ricos y de baja fecundidad.

Algo está cambiando según lo que publica Vicente Nieves en El Economista: una nueva tendencia ha emergido con fuerza en las últimas décadas en Suecia. Los datos demuestran que la fertilidad y la renta están íntimamente relacionadas, pero de una forma diferente: los hogares con mayores ingresos empiezan a tener más hijos. Este cambio de paradigma podría haber comenzado a extenderse a otros países.

Pero no es sólo un asunto tecnocrático. Como hemos visto en esta edición, el tener hijos o aumentar la población dejó hace tiempo de ser generalizada.Figuras muy visibles del mundo tecnológico y empresarial, con posturas políticas destacadas (pienso en Elon Musk) se han convertido en paladines de la causa de la natalidad. Este vídeo resume su ideario y cómo se ha convertido en un caso defendido desde posturas conservadoras…

… y muy contestado desde la izquierda. Nellie Bowles en NYT apuntaba a que el natalismo viene a ser una reivindicación de supremacistas blancos que temen “el gran reemplazo”. Noelia Ramírez y Begoña Gómez tienen un episodio de “Amiga date cuenta” en el que tratan el natalismo, pero también otras tendencias en lo que señalan como una práctica eugenésica.

Del archivo:

Los fuertecitos también tienen sesgos, como "la ilusión del cuerpo de nadador”

Llego al Tiktok de James Smith - o mejor dicho, me llega - y me sorprende con una estupenda reflexión descubriéndome “la ilusión del cuerpo de nadador”

@jamessmithptIntroducing the swimmer’s body illusion. #fittok #nutrition #training #bodybuilding #swimming

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En el mundillo del entrenamiento y la nutrición no lo había oído mencionar y eso que lo frecuento desde hace años. Los motivos pueden ser varios, pero uno no puede evitar pensar que va a la contra de los incentivos de entrenadores e industria: la ilusión del cuerpo de nadador ocurre cuando confundimos los factores de selección con los resultados. La gente piensa que puede conseguir el cuerpo de un nadador simplemente entrenando duro. Sin embargo, los nadadores profesionales no tienen su tipo de cuerpo porque entrenan duro; más bien, son buenos nadadores porque tienen ese tipo de cuerpo. El diseño de sus cuerpos es un factor de selección y no el resultado de sus actividades.

Lee Webb en Medium (en inglés) recopila varios ejemplos del libro “El arte de pensar: 52 errores de lógica que es mejor dejar que cometan otros” de Rolf Dobelli (Amazon, Todos tus libros). Webb lleva la discusión al sector de “los blogs de fotografía”, pero sus reflexiones son oportunas y se centran en un viejo debate de la lista: apostar por aquello en lo que eres bueno / tienes fortalezas Vs aquello “que te gustaría ser”.

Empleo e inteligencia artificial

He escrito en Error500 sobre el “Pánico moral con la inteligencia artificial y que la mayoría de los empleos sean cosas del pasado”.

Pánico moral con la inteligencia artificial y que la mayoría de los empleos sean cosas del pasado

Cajón de sastre

Joan Manuel Serrat: "No he esperado a tener 80 años para saber que todo pasa muy deprisa y que hoy eres fuego y mañana olvido". Entrevista de Carolina Robino en Bbc en español.

Un dato: por primera vez las emisiones de CO2 chinas disminuyen gracias al crecimiento de las energías limpias y no a la ralentización de la demanda eléctrica. Carbonbrief (en inglés).

¿Por qué ha crecido la derecha radical en Portugal? Diogo Noivo y Jorge M. Fernandes en El Mundo.

Estuve en el concierto de la que parece, ay, la última gira de Joaquín Sabina. Y regresamos a ‘Princesa’, cuya historia explicó muy bien Andros Lozano en El Español. Carlos Marco en El País sumó otro lado de la obra, cómo fue escrita junto al malagueño Muriel y nació con otra letra. Y, por una vez, me gustó mucho otra versión: la de Los Rodríguez

Un fenómeno silencioso se está gestando en Madrid: gente que se va a vivir a Valladolid y vuelve a trabajar en tren. Carlos Prego en Xataka.

La demanda internacional de matcha japonés está en niveles récord. Las exportaciones de té verde alcanzaron casi las 9.000 toneladas el año pasado, un aumento de diez veces respecto a hace 20 años, con el matcha representando más de la mitad de esa cifra. Las influencers lo propagan y pequeños productores japoneses, muchos mayores de 65 años, lo cultivan. Tamayo Muto en Nikkei (en inglés).

El hombre que se dejó morder más de 200 veces por serpientes venenosas (y cuya sangre sorprende a los científicos por su poder como antídoto). James Gallagher en Bbc en español.

Inserción laboral universitaria: lo que deberías saber antes de matricularte. Jon González.

Ahora que llega la temporada, puedo decirlo claro: A favor de comerse la piel del melocotón. Cristina López de la Torre en The Conversation nos da argumentos.