Si vivimos en un universo determinista entonces Kim Kardashian tenía que estudiar derecho necesariamente
Amigos, he intentado que la relevancia de la pandemia no colonizara el Causas y Azares. Hoy tenemos historias de toda una vida, obsesiones intelectuales que derivaron en obsesiones personales de un servidor y, sí, varias aristas de cómo nos estamos contando la crisis.
Kim Kardashian parece que no tenía por qué estudiar derecho
Murió Radomir Antic, momento de recuperar la estupenda y larga entrevista de Álvaro Corazón Rural en Jotdown. Para los que seguimos el deporte en los 90 - además del maravillo revival que están programando Teledeporte y Gol, a complementar con Youtube - esta ventana a como lo vivieron los protagonistas, como era la relación con jugadores, con la prensa, con los dueños de los clubs es fascinante.
Raquel Piñeiro en Vanity Fair con la historia de una pareja de los 90, que siempre me cayó y en la que acabó triunfando el amor: Carlos y Camilla. Eso sí, no recuerdo bien que la narrativa fuese el salto de malvada frente a Diana a símbolo del amor. En mi recuerdo yo siempre fui partidario de Camilla, carente de una belleza y de un carisma que precisamente convertían el amor que tenía con Carlos en lo más auténtico de toda la historia.
“En dos años, la estrella de reality se ha convertido en una fuerza en la justicia penal, mientras continúa vendiendo ropa interior para esculpir el cuerpo y enchufar productos dietéticos en Instagram” Elizabeth A. Harris sobre Kim Kardashian ¡que es mucho más interesante que el estereotipo con el que se la despacha! en el NYT (en inglés). Álvaro González hace un retrato sobre ella en Culturplaza: “su giro es interesante porque yo me pregunto cuántos de los que desprecian a la Kardashian por ser famosa a partir de un vídeo en el que aparecía disfrutando del sexo oral, si tuviesen una fortuna de 370 millones de dólares (a fecha de noviembre de 2019) y su marido, Kanye West, unos 240, harían lo que ha empezado a hacer ella: ponerse a estudiar la carrera más coñazo”
En Devs hay humanismo y una trama de determinismo, multiversos y computabilidad
Me está gustando mucho Devs, la serie que emite HBO. Obra persanolísima de Garland permite una lectura en forma de thriller con toques románticos en un mundo de informáticos con una heroína valiente y decidida frente a la corporación. A la vez permite ser escudriñada desde la física: en el fondo la parte clave de la serie es la física de la realidad, si estamos en un universo determinista, si ese universo determinista es computable o si la teoría correcta es la del multiverso.
No voy a anticipar nada demasiado importante de la trama (de hecho no apuesta por la intriga, desde el principio sabemos lo más importante sobre el asesinato), pero Devs la estoy disfrutando porque me lleva de vuelta a inquietudes y dilemas de joven universitario de informática atraído por las matemáticas y la física. Sobre el determinismo y la computabilidad discuten varias hipótesis, la de Broglie–Bohm, la de los multiversos de Everett (en realidad la pugna entre estas dos es el gran misterio de la serie) y la de Penrose que aparece en segundo plano. Precisamente con Penrose tengo una relación especial, cuando grabamos el primer episodio de Captcha conseguimos empezar con Ramón López de Mántaras (director del Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial y uno de los grandes expertos y pioneros de la IA en España) y en la conversación le planteé la teoría de Penrose, desde la física cuántica infiere que la conciencia humana no es computable y por tanto no habrá nunca una inteligencia artificial fuerte. Mantarás dejó caer que bueno, que “La nueva mente del emperador” (el libro que yo sacaba a colación y que me fascinó en mi juventud con una bellísima explicación del teorema de Gödel, está en Amazon) era “muy difícil de entender bien” (aquí no se si concluir si hubo una vez en la que llegué a ser muy listo o que mejor no me flipara con los libros que son para los mayores). El caso es que en Devs tienen a Penrose ahí delante y en ningún momento lo discuten ¡y es clave!. Si me cruzo con Garland un día será lo único que le pregunte.
Otros temas que aparecen en la serie y permiten desdoblarla: el suicidio cuántico que explicara Santiago Campillo. ¡Devs es muy audaz: de la teoría física que explique la realidad se desprende una moralidad! no sólo para las muertes que ocurren en el transcurso de la serie sino, todavía más importante, para la moral de nuestros actos en el pasado, que es la clave de la motivación de nuestro genio protagonista, Forest. La teoría de que seguramente vivimos en una simulación, que discutía brillantemente Sánchez-Migallón: si somos capaces de simular la realidad y, por tanto, en esa realidad simulada hay simulaciones de otras y, por tanto, puede haber infinitas simulaciones, entonces casi seguro que vivimos en una simulación ¡y nada en realidad importa! Imposible no caer en el nihilismo. Pero Garland consigue entremezclar elementos humanísticos, religiosos, cuasi místicos: Stewart declama el Aubade de Larkin y advierte que poder ver el pasado pero no entender a Marco Antonio y Cleopatra puede ser fatal.
Aunque tengo mis discrepancias con el conjunto del libro, “El milagro de Spinoza” de Frédéric Lenoir (Amazon) consigue explicar muy bien la posición del filósofo sobre el libre albedrío: no es más que una ilusión, “Los hombres se creen libres porque tienen conciencia de sus voliciones y de sus apetitos, y no piensan, ni siquiera en sueños, en las causas que les disponen a desear y a querer, porque las ignoran” (luego Spinoza se las apañará para sentenciar que podemos llegar a ser libres, con conocimiento y liberándonos de nuestras pasiones). Uno se puede perder en los textos de La máquina de Von Neuman o atender a los esfuerzos científicos que glosa Javier Jiménez. Cuartango leyó su Ética aunque creo que, como otros, es reduccionista: el determinismo no tiene por qué ser biológico, las causas que nos determinan podrían ser el entorno también.
Podría añadir más, sobre la serie han escrito Pere Solá (que hace una lectura estupenda de la arquitectura en la serie), Tones, Marina Such con ese oído y ese ojo para como la música se mete en en las series, Alejandro G. Calvo que comenta sobre todo la narrativa de la serie.
Ligar o programar, quedarnos quietos confinados
Tinder se usa un 26% más durante el confinamiento. Otras aplicaciones para ligar tienen cifras de crecimiento y hay un patrón interesante que explica Antonio Sabán en Genbeta “Las videollamadas han crecido un 9%, pero lo más interesante es la división por sexos que hay en el crecimiento de mensajes enviados. Las mujeres envían estos días un 25% más de mensajes que durante días corrientes, mientras que los hombres han aumentando "tan solamente” un 12% sus mensajes.“
Si eres de los que en cuarentena se ha planteado lo de "aprovecho para aprender un lenguaje de programación”, Javier Pastor ha hablado con 17 maestros que recomiendan con qué empezar (hace 20 años que no programo, así que no se cuenta conmigo en estos temas. Eso sí, mantengo intacto mi repudio a Javascript)
Lo estamos haciendo bien. “Ni en Marbella, ni en Zahara de los Atunes, ni en Tarifa, ni en Chiclana. Tampoco en Valencia, ni en Llanes (Asturias), ni en Galicia, ni en la Costa Brava. Los turistas nunca llegaron” En El País. “Una visualización de Bloomberg a raíz de los datos de seguimiento de dispositivos de Google muestra cómo los españoles, frente a lo que muchos piensan, están cumpliendo el confinamiento a rajatabla, de forma envidiable por la mayoría de países.” Por Esther Miguel Trula
Papá cuéntame otra vez esa historia de los bots
Hay un gran revuelo mediático: los bots, las fake news, los intereses oscuros. El gobierno plantea cambia los legales considerando este tema un gran y urgente problema social. Lo daba Iván Gil en El Confidencial mientras Enrique Pérez nos trae el criterio de Borja Adsuara y Carlos Sánchez Almeida. Estos intentos siempre me parecen un intento de volver a domeñar la opinión pública y dirigir que se ha vuelto incontrolable.
Mientras, el Presidente Sánchez en el Congreso de los Diputados mientras solicitaba la ampliación del Estado de Alarma, soltaba varias mentiras para defender su gestión. Buen trabajo de revisión en Maldita.es. En el mismo “fact checker”, “El troleo de las cuentas de Twitter que imitaban a bots: el origen no es automatizado y se suspendieron al menos 300 cuentas”. El caso es que mentiras, errores y confusiones, hay. Un ejemplo claro lo explica Ana Pastor en Newtral con la mezcla de medidas de Whatsapp de acotar los reenvíos con el papel del medio como censor en Facebook.
“En parte es un señuelo: se destaca al adversario más cafre, se mancha por asociación toda crítica y el debate sobre la libertad de expresión y la posverdad distrae del análisis de la gestión de la epidemia” Daniel Gascón
“Puede entenderse que un tuitero semidesconocido quiera expresar su exasperación por el confinamiento con exabruptos, o que un periodista o un político aprovechen la situación para vindicar su posición ideológica, pero cuando todos los tuiteros, políticos o periodistas hacen lo mismo al mismo tiempo, la conversación pública se convierte en el equivalente moral de un edificio en llamas” Siempre interesante González Férriz, esta vez en Telos. En esta pieza creo que le discutiría un par de aspectos: el internet frente a “actores centralizadores que por diseño se basan en la viralidad” y un problema que tenemos la gente que trabajamos con información, la motivación de la actividad online de la mayoría no estriba en contar la verdad sino en promover el bien (es decir, su causa ideológica, activista)
Preguntas y respuestas en la cuarentena
Qué aprender de Italia. En El Confidencial están cubriendo muy bien el frente italiano y los errores y aprendizajes que bien podrían iluminarnos. Las conversaciones con Pierluigi Lopalco y con Sergio Romagnani señalan la mala suerte de la región rica, Lombardía, y la fortuna de Véneto, salvada porque “no siguió las instrucciones de al OMS”. En España también tenemos una enorme disparidad por regiones, lo explican Javier Jiménez y Javier Lacort: cómo afectan las distintas variables a los datos finales para ayudarnos a leer las gráficas con todo el contexto sociodemográfico, sanitario y epidemiológico.
Un tema sujeto a intenso debate es cuánta gente está muriendo realmente. Parece muy claro que no son el número que se está dando oficialmente, con algunas regiones con un exceso de mortalidad de casi el 200%. En El País explican bien la dificultad para conseguir un conteo exacto y una conclusión: es probable que no lo sepamos hasta pasado bastante tiempo. Economist apunta a que el fenómeno sucede en regiones de varios países afectados y The Upshot viene con los números de Nueva York: tienen el doble de muertos que lo habitual en esta época.
El negocio cuando volvamos. Paz Álvarez trae un Cinco Días un dilema para las marcas: cómo seducir de nuevo al consumidor. El sector del audiovisual tiene un reto delante importante también, como explica Sara Heredia en Sensacine: “Estrenos aplazados y producciones paralizadas. Espectadores y profesionales se enfrentan a una situación completamente nueva que va a cambiarlo todo a la espera de conocer sus consecuencias.”. Los medios y su negocio. Crecimiento de suscriptores en dos medios en plena pandemia. Escolar explica el caso de ElDiario.es, Ken Fisher el de Ars Technica
El acuerdo en la Unión Europea. Daba la noticia Pablo Suanzes en El Mundo: Hasta 550.000 millones de euros en líneas de liquidez para los Estados (a través del Mecanismo Europeo de Estabilidad), las empresas (mediante el Banco Europeo de Inversiones) y para evitar despidos masivos, usando el Sure, un mecanismo propuesto la semana pasada por la Comisión Europea. Sobre la letra pequeña del plan escribe Diego Crescente en La Información.
El debate no cerrado de eurobonos “Los países del sur reclaman emisiones conjuntas de deuda. El norte se niega a más transferencias económicas. Y los expertos recuerdan que cualquier acción mancomunada implica más control presupuestario”. También Suanzes. “El rechazo alemán de los eurobonos es insolidario, mezquino y cobarde” Steffen Klusmann, Redactor jefe de Der Spiegel, escribe una pieza muy dura traducida al español.
El pellizco de Ángeles Caballero; Enrique G. Máiquez en “Los niños” cita al poeta Jesús Montiel, “Aceptan la situación porque la verdadera normalidad de un niño es su familia. He observado que un niño, mientras se desarrolla en un entorno amoroso -que no perfecto- no ambiciona mucho más”
Origen del Covid-19 y genética. “Murciélagos y pangolines: el coronavirus es una zoonosis, no un producto de laboratorio” Manuel Peinado Lorca en The Conversation. Lluis Montoliú en Naukas sobre el estudio genético con el que 23andme pretende descubrir determinantes genéticos que expliquen por qué las personas infectadas por el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19, presentan tantas diferencias en el desarrollo clínico de esta enfermedad.
El peligro de la alarma o su conveniencia. Géraldine Schwarz tiene un discurso muy interesante, aquí entrevistada por Juan Cruz sostiene justo lo contrario de lo que un servidor piensa: ¡deberíamos haber provocado más alarmismo antes y no menos!
Cajón de sastre
Cazón en adobo, tortilla de camarones y otras comidas que han aportado los gitanos a la cocina española. Un tema de Miguel Ayuso
Hay otras crisis, este tema del NYT en español sobre las maternidades: una tasa de mortalidad disparada, ausencia de equipamiento básico, la mitad de los médicos del país se han ido.
Onlyfans vende una ficción (toda transacción de comercio sexual es comprar una mentira) de acceso a la intimidad pornográfica de actores. Permitiendo sexo frente a Patreon consigue comisionar bastante más (20% vs 5%). Ahora salva al porno en cuarenta. Un tema de Francisco Rouco en Xataka