Lo de siempre, pero moderno y con un nombre en inglés
El País ha superado los 100000 suscriptores digitales de pago. Es una buena noticia porque su modelo de muro es muy amigable para nuestra lista de correo: uno puede tener la esperanza de que los lectores tendrán todavía la capacidad de acceder. La edición de hoy viene tocada porque uno de los grandes temas que deseaba tratar se quedó tras un muro de pago infranqueable (en El Confidencial) y no ha habido manera de compartirlo sin llevar a un “pase usted por caja”
Lo de siempre, pero moderno y con un nombre en inglés
Le han llovido críticas (por no hablar de precariedad, por abonarse al anglicismo), pero estimo interesante el tema de Susana Carrizosa “Los perfiles laborales más demandados se apuntan al ‘job hopping’: cambiar de trabajo cada uno o dos años” en El País. Es un problemática “de clase” (profesionales urbanos y liberales, universitarios) pero tampoco hay necesidad de que cada reportaje recoja todas las situaciones. Mis dos céntimos: con teletrabajo y menor apego emocional este circular por el mercado cada poco tiempo aumentará (y con él una sensación de sinsentido cada vez mayor)
Esta iniciativa “Comprar un cerdo ibérico entero desde 835 euros: invertir hoy para recibir carne y embutido más barato” yo la llamaría “matanza as a service” para que pueda encajar en las tendencias actuales. Miguel Ayuso en Directo al Paladar nos lo cuenta con detalle, con sus ventajas incluidas: es negocio directo con el ganadero y “comprar un cerdo entero supone un ahorro de entre el 25 y el 35 %”. En términos prácticos veo las complicaciones: o invitas un día a 20 amigos o ten una despensa gigante para todo lo que sale de ahí
En el caso de Beatriz Montañéz y su estilo de vida de eremita moderna hemos tenido entrevista de Angels Barceló en Hoy por hoy y reportaje en El País Semanal firmado por Pablo de Llano y luego piezas derivadas sin firmar como en cualquier noticia morbosa con los puntos más llamativos en las secciones de guerrilla de otros medios (LOC, El Periódico). No he podido evitar que mi atención se agarrara al momento ¿y de qué vives? en la entrevista de la radio (Beatriz quizás no lo sepa, pero es el reflejo extremo de los seguidores de la independencia financiera)
La videoartista Lucy Gunnig presentó en 19954 su obra “The Horse Impressionists” (Tate) actualmente expuesta en el Centro Pompidou de Málaga. Es un vídeo corto con cinco mujeres imitando a caballos: relinchan, cabalgan.. críticos interpretaron que era una obra feminista (exponer a las mujeres fuera de su estereotipo) y algo animalista (haciendo lo mismo con nuestra relación no normativa con los caballos). Me he acordado de ella al contemplar la exposición de Hugo en La Isla de las Tentaciones III y su defensa de su preferencia afectiva por una cabra (hay estudios que explican esta postura). En feminismo no, pero a la hora de - como se dice ahora - “normalizar” el afecto por los animales de granja, creo que Hugo ha roto barreras que Cunning no soñó ni traspasar
Cambiar de trabajo, hacer matanza (o amar a las cabras) o apartarse en una suerte de retiro espiritual. Uniendo los puntos me he acordado del “efecto Lindy” (o quizás debería decir mejor “Lindy effect”) que postuló Nassim Taleb: si uno quiere saber cuánto durará algo no perecedero, algo que no está sujeto a los límites de una vida natural, entonces la primera pregunta que debes hacerte es cuánto tiempo ha existido. Según Taleb, cuanto más viejo es, más probabilidades hay de que dure más tiempo (y la razón es que ha superado la prueba del tiempo, es algo que ya ha sobrevivido muchos cambios sociales y se ha adaptado en una suerte de evolución social). Es decir, es más probable que en el siglo próximo haya monjas de clausura, pero no tanto influencers de estilo de vida vendiendo cremas. Sobre el tema, del propio Taleb en Wired
Cuando pasarte a la raza oprimida tiene sus ventajas
¿Qué pasa si las personas no solo inventan síntomas médicos para llamar la atención, y si también fingen opresión? Helen Lewis en The Atlantic (en inglés) sobre el creciente fenómeno: Krug se hacía pasar por negra cuando era “blanca y judía”, Carrillo se inventó ser del exilio cubano cuando se llamaba Carroll y era de Detroit, Dolezal que se oscureció la piel para ocultar que sus padres eran blancos… historias en el activismo o en ambientes culturales de izquierda en donde se busca estar asociado a las víctimas y no a los “opresores”. Leyendo esta pieza me he reafirmado en que para los medios progresistas estadounidenses (The Atlantic), soy de derechas en los temas raciales por no considerar que por ser blanco (bueno en parte de la izquierda USA los españoles somos “de color”) actúo como opresor y por tanto mi solución a este problema no es razonable (léase decirles a estos penitentes que no hay pecado original racial y en lo que hay que concentrarse es en ser igualitario entre individuos y grupos ahora)
El caso Dolezal de hecho derivó hacia un debate, el de la posibilidad del transracialismo. Esther Miguel en Magnet trató el tema, que se puede resumir en algo como la transexualidad o lo transgénero pero desde el punto de vista de la elección de la raza. Recoge también los argumentos en contra: “Tienen la opción de decidir cuándo llevar las cargas y la discriminación que sienten otras razas y al mismo tiempo cosechar los ‘beneficios’ al tomar dinero de organizaciones creadas para empoderar y ayudar a las comunidades negras”
En El Impostor (Amazon) todavía teníamos algo del mejor Cercas (bueno, quizás se nos fue ya alargando y repitiendo durante el libro) y es una historia, la de Enric Marco, que es la de una mentira mantenida durante décadas: se hizo pasar por superviviente de los campos nazis y que fue desenmascarado en mayo de 2005, después de presidir durante tres años la asociación española de los supervivientes, pronunciar centenares de conferencias, conceder decenas de entrevistas, recibir importantes distinciones y conmover en algún caso hasta las lágrimas a los parlamentarios españoles reunidos para rendir homenaje por vez primera a los republicanos deportados por el III Reich. Algo más accesible y actual, el documental El Infiltrado (Filmin) encaja en eso que se suele enmarcar como “el documental del año” que juega la carta de infiltrar a dos hombres en Corea del Norte para destapar un escándalo que pone en la picota al regimen de Kim Jong-Un y a su propagandista español, el popular diplomático Alejandro Cao de Benos
Matías en Gizmodo nos cuenta la historia de una influencer japonesa es en realidad un hombre de 50 años con un filtro para parecer mujer. El motorista, que vive en la prefectura de Ibaraki, empezó a subir fotos con aspecto de mujer porque “nadie quiere ver a un tío”
Cajón de sastre
El alcalde de Morata de Tajuña pide no culpar a las famosas “palmeritas” del confinamiento del pueblo, informa EFE. Yo he hecho turismo de palmera de chocolate, no lo oculto, en este magnífico pueblo ¡pero no durante la pandemia! Amigos, tendremos tiempo de ir y volver y regresar otra vez, mientras un consejo: se pueden comprar por internet pero son peor que la coca
Muertes, presos republicanos y una obra monstruosa: la historia de la Engaña, el túnel de tren abandonado en Cantabria. Marcos Pereda en Público se remonta a los años 40 y habla con algunos de los que participaron en la obra de entonces y que nunca se terminó
Ha muerto Antón García Abril y me he quedado enganchado al hilo de Gonzalo Altozano, que además de a sus bandas sonoras lleva a otras composiciones, entre ellas a “Tristeza de amor” de Hilario Camacho que de pequeño se quedó grabada en mi memoria
Un reportaje de datos espectacular en Upshot: en Estados Unidos los demócratas y los republicanos viven separados unos de otros, hasta el vecindario, en un grado que plantea preguntas provocativas sobre qué tan cerca se han alineado las preferencias de estilo de vida con la política y cómo incluso los vecinos pueden influirse entre sí. Lo más divertido con la foto resultante es la reflexión sobre la casualidad: donde vive la gente y como vive correlaciona muy fuerte son su preferencia política, pero es difícil saber qué es el huevo y qué la gallina
Aurora Nacarino-Brabo resumió en ocho claves la “semana de vértigo político” pero su artículo está tras un muro de pago… al menos podemos asomarnos a su resumen en Twitter. Puntos que subrayo: la estrategia de Iglesias de ser gobierno y oposición al mismo tiempo; PP y Vox no suman para gobernar el país; las cuestiones materiales están muy relegadas (esto es una victoria del gobierno emho). Me asomaría también a la pieza de Arias Maldonado en The Objective “Partidos contra votantes”
“Son españoles, consiguieron que se plantara aguacate hasta en Galicia y ahora están cultivando cacao y café por primera vez en Europa” Víctor Millán en Xataka con un reportaje sobre ese estupendo proyecto que es la finca experimental La Mayora, en Algarrobo-Costa, núcleo de operaciones del Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea del CSIC
“Así se manifiesta el lado oscuro del tecnoestrés” Mar Cabra en Alimente: “El número de trabajadores digitales con mala salud se duplica cuando continúan con su labor en su tiempo libre. Los riesgos: depresión o enfermedad cardiaca”
La españolización de Lidl y Aldi: cómo los alemanes están conquistando a los productores nacionales. Analía Plaza en El Diario
No hace falta que te termines ese juego (o esa novela, o esa serie, o esa peli). Por Javier Pastor
En La nueva Ilustración Evolucionista, Pablo Malo entrevista a Haidt sobre su clasificación de los sistemas psicológicos sobre los que se fundamenta la moralidad y mucho más: si aumenta la polarización y los medios e internet tienen algo que ver, si hay fundamentos “evolucionistas” en nuestros sistemas morales y “Por qué los grupos humanos cometen actos moralmente intolerables para muchas o la mayoría de las personas, incluso hasta el punto de cometer un genocidio, en represalia por lo que perciben como crímenes cometidos contra su grupo y su moral”